domingo, 28 de agosto de 2016

"A Beautiful Mind"

Cuando encendemos la tele un día cualquiera y ponemos las noticias, la mayor parte de las palabras que escuchamos y las imágenes que vemos son horribles; todo actos bárbaros de una sociedad que parece y en muchos aspectos está enferma. Pero como todos sabemos o al menos deberíamos saber, el mundo y la vida, en ocasiones, nos ofrece gratas sorpresas y milagros, aunque no se muestre.
Uno de los motivos por los que me gusta tanto ver películas es porque muchas de ellas me permiten evadirme de esa angustiosa realidad y de los problemas que día a día pueda tener, mostrándome en muchos momentos historias increíbles e inspiradoras, como la que me movió a escribir hoy.
Se trata de la película “A Beautiful Mind”, con la que quedé impresionado al terminar de ver, cuando descubrí lo que se escondía tras esta asombrosa historia.
No quiero contarles absolutamente nada de esta película para aquell@s que no la hayan visto aún, y les recomiendo que no busquen nada, solo que la vean.
Debo decir que me ha encantado porque me ha hecho reflexionar y me ha mostrado que hay cosas “imposibles” que se pueden alcanzar si de verdad lo deseas y siempre con ayuda del amor, porque eso es lo que nos hace más poderosos. Sin amor el mundo estaría completamente perdido.
Esto me obliga a decirles que cuando vuelvan a ver las noticias y observen todas aquellas imágenes horribles que en ellas aparecen, recuerden que la única forma de hacerlas desaparecer es con el amor, no con el odio. Como dijo Siddharta Gautama Buda, "El odio no disminuye con el odio. El odio disminuye con el amor." 

jueves, 4 de agosto de 2016

La vida.

Hay momentos de nuestra vida en los que pensamos que tenemos todo resuelto; que el viento sopla a nuestro favor y nos llevará hacia un lugar maravilloso. La realidad es otra: nunca somos empujados en la misma dirección. A veces esperamos simplemente a que llegue un momento, esperamos que la vida nos lo traiga para seguir avanzando, pero he aprendido que la vida nunca espera, siempre va hacia delante y las cosas no ocurren como nosotros queremos. En ocasiones es complicado mantenerte en pie y continuar como si no ocurriera nada, tanto que te preguntas si es posible. Pero de eso se trata, “de aguantar los golpes sin dejar de avanzar, así es como se gana”. Aguanta todo dolor que se te presente, te ayudará a ser más fuerte y a aprender. Todos tenemos que enfrentarnos alguna vez a dolores que nos destruyen el corazón. Solo queda asumirlo, levantar la cabeza y caminar.